Empezamos esta semana hablando de las características del color gris en decoración, que tan de moda está en los últimos años en cualquiera de sus gamas, desde el mas claro al mas oscuro.
Entre sus principales cualidades está la de aportar serenidad y modernidad, pero además hay una característica fundamental.....su capacidad de resaltar la decoración. En este aspecto el color gris en las paredes tiene una importancia esencial en decoración puesto que otorga notoriedad a los elementos que coloquemos sobre ellas. Por ejemplo si colgamos un cuadro sobre una pared gris este destacará enormemente, o si ponemos un mueble este color conseguirá que resalte de manera singular.
Ya no digamos si nuestro rodapié, molduras o puertas están pintadas en color blanco......el color gris conseguirá que brillen y luzcan especialmente.
El
inconveniente que tiene este color es que hay que tener sumo cuidado con
que lo combinamos, ya que puede convertir la atmósfera en una lugar
frío. Para ello lo mejor es mezclarlo con algún color cálido o con
suelos de madera, lo que hará que se suavice esta sensación.
Otro
peligro del uso del color gris en las paredes es que oscurezca las
estancias, para evitar este efecto debemos introducir el color blanco y
el negro para que los contrastes creen una aportación extra de
luminosidad.
Si
el color gris nos gusta mucho, además de las paredes podemos
introducirlo en el mobiliario y textiles jugando con diferentes gamas,
siempre y cuando nuestra vista tenga descanso en alguna superficie de
color blanco.
Otro truco para conseguir una decoración perfecta con la mezcla de diferentes grises en una misma habitación es introducir algo de vegetación, es decir plantas, ya que su tono verde aportará frescura y luz, restando frialdad y monotonía.
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